Sin duda el café ha estado y seguirá ad hoc durante años y años, siempre y cuando, claro, cuidemos del planeta, ya que los cafetos suelen ser bastante frágiles. Así que, además de eso, es primordial profundizar un poco más sobre el café para poder sentirlo, tanto en el paladar como en el alma.
Siendo así, les contamos sobre algunos métodos para preparar café. Considerando esto, puedas llegar a una cafetería de especialidad y pedir una buena taza de coffee como se debe.
Toma en cuenta que pedir un método, significa la extracción de sabores y aromas dependiendo cuál decidas y escuche tu corazón. Te contamos tres de ellos:
PRIMER MÉTODO: CHEMEX
Ideal para un par de tazas y una buena charla con ese alguien que te gusta, pero por alguna razón no se ha dado ni un beso.
Diseñada por el alemán Peter Schlumbohm, fue vista en 1958 como una obra de arte y expuesta en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Esta obra de arte se popularizó con los años y su inspiración nació del matraz de Erlenmeyer.
La extracción del café es por goteo y la preparación en él es muy sencilla, basta con ponerle un filtro de papel especial para café en la parte superior del Chemex, añadir el café con una molienda ligeramente gruesa y añadir el agua a 93 grados uniformemente cada 30 segundos, durante 3 o 4 minutos.
¿QUÉ PASA DESPUÉS?
El café comenzará a burbujear (bloom) y a gotear poco a poco en la parte inferior. Una vez terminado el goteo, lo que pasará será un final feliz en una taza y por supuesto en esa platica con tu pareja.
SEGUNDO MÉTODO: V60
Su nombre está explícito en su forma, ya que simula una “V” y su ángulo es de 60 grados. Al igual que el Chemex funciona por goteo y es ideal si lo que quieres es una extracción suave y dulce ya que baja su acidez. Así que si eres medio “ácido” o “ácida” XD, invita el V60 y endulza esa conversación.
TERCER MÉTODO: CAFETERA CASERA
Si de pronto la o lo invitas a tu casa a tomar el café y lo único que tienes es una cafetera casera eléctrica, no te preocupes, también es un método de extracción y dile que le estás invitando un café de especialidad por percolación. Es muy fácil de usar, sólo pon el café en la parte de arriba, ponle agua en la parte de atrás, enciéndela y la cafetera hará lo suyo.
Ya tienes tres métodos para impresionar y no sólo pedir el típico americano, que, no está mal, pero siempre hay que tener un as bajo la manga.